Señor, bendíceme con una buena noche de sueño donde pueda dormir en paz.
Perdóname por las cosas que pude haber hecho hoy que no te honraron. Gracias por amarme tanto y que me conozca tanto.
Necesito tu ayuda todos los días y te agradezco por la fuerza que me das. Gracias también por ayudarme a saber que contigo incluso las cosas difíciles son posibles.
Bendice a mi familia y a mi hogar y mantenme a salvo toda la noche. Que tus ángeles me protejan y velen por mí como prometiste.
Conoces mi nombre y me haces sentir especial y amado. Cuando me siento mal me ayudas a sentirme mejor.
Gracias, Jesús, por tu buen cuidado y por enseñarnos cosas en la vida que me ayudan a crecer.
Bendice a la gente del mundo, y ayúdales a saber que tú también los amas. Gracias por todas las personas ayudan a que este mundo sea mejor: maestros, médicos, policías y bomberos, etc.
Gracias por desear lo mejor para mi vida. Ayúdame a seguir obedeciéndote y a amarte cada vez más.
Cuando despierte por la mañana, pon una sonrisa en mi rostro y tu propósito en mi corazón, para comenzar un nuevo día.
Te amo, Jesús. Buenas noches. Amén.